miércoles, 8 de abril de 2015

Examen resuelto de selectividad: Descartes.

EXAMEN DE DESCARTES (MODELO SELECTIVIDAD) RESUELTO. TEXTO. “Por el contrario, examinando de nuevo la idea que tenía de un Ser Perfecto, encontraba que la existencia estaba comprendida en la misma de igual forma que en la del triángulo está comprendida la de que sus tres ángulos sean iguales a dos rectos o en la de una esfera que todas sus partes equidisten del centro e incluso con mayor evidencia. Y, en consecuencia, es por lo menos tan cierto que Dios, el Ser Perfecto, es o existe como lo pueda ser cualquier demostración de la geometría”. DESCARTES, Discurso del Método IV CUESTIONES. 1.- Describe el contexto histórico-cultural y filosófico del texto. 2.- Comenta el texto: 2.1.- Explica el significado de los términos subrayados. 2.2.- Identifica y explica la temática planteada en el texto. 2.3.- Justifica el texto desde la posición filosófica del autor. 3.- Relaciona la temática del texto con otra posición filosófica y valora razonadamente su actualidad. _____________________________________________________________________________ 1.- Describe el contexto histórico-cultural y filosófico del texto. La vida de Descartes transcurre entre 1596 y 1650. Nació en la Turena francesa, en una ciudad llamada la Haya y, con apenas ocho años, su padre lo mandó a estudiar al colegio la Flèche, dirigido por los jesuitas. Allí adquirió una importante formación humanística y también en matemáticas, física y astronomía. Después estudió Derecho en la Universidad de Poitiers y, terminados sus estudios se dedicó a viajar. Más tarde se instaló en Holanda, en donde vivió durante 20 años. Holanda era entonces el paraíso del pensamiento libre. Y en 1649, ante la insistencia de la reina de Suecia, se trasladó a Estocolmo para darle clases, pero la dureza del clima agravó sus problemas respiratorios y murió al año siguiente. 1.-Contexto histórico-cultural.- La época que vivió Descartes fue compleja en los aspectos político y religioso. La crisis política viene desencadenada en parte por la crisis religiosa. El acontecimiento más importante fue la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). El origen de esta guerra fue el conflicto entre los Estados que estaban de acuerdo con la Reforma luterana y los que se mostraban en desacuerdo que dirigen la Contrarreforma católica. Descartes se alistó en las tropas del duque de Baviera y luchó a favor de los católicos. Es en el transcurso de esta guerra cuando escribe el Discurso del Método. Este conflicto provocó una crisis en la sociedad y un descenso de la población motivado tanto por el conflicto en sí como por las consecuencias que se derivan del mismo, tales como el hambre, las epidemias… Esta guerra se resuelve con la Paz de Westfalia, que divide a Europa en un norte con mayoría protestante y un sur con mayoría católica. En Francia nos encontramos a personajes como el cardenal Richelieu, que centraliza el poder en Francia y se alía con las fuerzas protestantes suecas para luchar contra la expansión del Sacro Imperio Romano-Germánico de los Habsburgo. Francia se convirtió en una gran potencia. El contexto cultural está marcado por el triunfo del Barroco. La palabra “barroco” significa “perla irregular” y define la crisis y el contraste que se da en este período. El Barroco se manifiesta en el arte, en la pintura de Rubens o Ribera que expresa el movimiento, el contraste de esa sociedad, la escultura de Bernini y la arquitectura de obras como el monasterio del Pilar de Zaragoza o el Palacio de Versalles de Paris. El Barroco repercute también mucho en la literatura y en la obra de los grandes representantes de este período se manifiesta la idea de la fugacidad de la vida, el movimiento, el pesimismo, así como el contraste entre realismo e idealismo. Shakespeare, Calderón conciben la vida como un teatro en que cada uno es un actor que desempeña un pequeño papel, o como un sueño efímero del que despertaremos alguna vez. En Cervantes el contraste entre realismo e idealismo es evidente en su obra cumbre: el Quijote. 2.- Contexto filosófico.- En el ámbito filosófico destaca el triunfo de la ciencia moderna que surge en el campo de la astronomía con Copérnico, Kepler y Galileo. La física y la astronomía habían estado dominadas por las teorías de Aristóteles y de Ptolomeo, que daban demasiada importancia a los datos que proporcionan los sentidos. Galileo, en cambio, defiende que la naturaleza está escrita en lenguaje matemático y por ello conocerla requiere usar la razón como fuente de conocimiento. Teniendo en cuenta que Descartes es un filósofo francés, hay que subrayar la importancia que tuvo en Francia el escepticismo de Montaigne. Era comprensible que en una época marcada por la crisis se difundiera un pensamiento escéptico. Sin embargo, Descartes está convencido de que el conocimiento es posible y por eso huye de la duda escéptica. Ahora bien, los dos movimientos filosóficos que más se enfrentan en esta época son el racionalismo y el empirismo. El Racionalismo es la teoría según la cual la razón es la única fuente de conocimiento válida. El racionalismo se inspira en el modelo matemático y acepta la existencia de ideas innatas, que, según Spinoza son semillas que germinan con el tiempo. El racionalismo triunfó en la Europa continental y tiene como principales representantes a Descartes, Spinoza y Leibniz. El Empirismo es la teoría según la cual la experiencia es la única fuente de conocimiento válida. El empirismo se inspira en el modelo científico y niega la existencia de las ideas innatas, pensando que la mente de un niño al nacer es como un papel en blanco que sólo se llena con la experiencia. El empirismo triunfa en la Europa insular y tiene como principales representantes a Locke, Hume y Berkeley. 2.- Comenta el texto: 2.1.- Explica el significado de los términos subrayados. EXISTENCIA.- Es el hecho de ser. Es una cualidad necesaria del ser perfecto, porque su perfección implica su existencia, ya que si no a la perfección le faltaría una cualidad. Los demás seres son contingentes (“son, pero podrían no ser”), por tanto, su existencia no es necesaria.. SER PERFECTO.- Se refiere a la sustancia infinita; es decir, a Dios. En rigor, Dios es la única sustancia, puesto que es el único ser que existe por sí mismo, según Descartes. El atributo de Dios es la infinitud y, puesto que como tal es perfecto e inmutable, no admite modificaciones. Por tanto, no tiene modos. Descartes demuestra la existencia de Dios partiendo de la sustancia pensante, al decir que el pensamiento piensa ideas y que estas pueden ser de tres tipos: adventicias, facticias e innatas. La infinitud no es una idea adventicia y, según Descartes, no puede ser facticia, por lo que tiene que ser innata. A partir de esta premisa Descartes demuestra la existencia de Dios mediante los argumentos gnoseológico, causal y ontológico. 2.2.- Identifica y explica la temática planteada en el texto. El Discurso del Método es una obra dividida en seis partes, que tiene una estructura argumentativa en la que aparecen datos autobiográficos. Esta obra está escrita en francés, lo que supone una novedad con respecto a lo que se acostumbraba, que era escribir en latín o griego, y abre el camino a que otros pensadores que no dominaban las lenguas clásicas pudieran dar a conocer sus obras. En la segunda parte, Descartes plantea cómo ha de ser el método que debe utilizar. En la cuarta parte, partiendo de la duda, aplica este método para demostrar las tres sustancias: Dios, alma y mundo. Este texto pertenece a la cuarta parte y aparece cuando Descartes, tras vencer el solipsismo, acomete la tarea de demostrar la existencia de Dios y lo hace mediante tres argumentos: gnoseológico o primer argumento causal, según el cual si soy imperfecto pero tengo la idea de un ser perfecto y esta idea es innata ha tenido que ser puesta en mí por un ser perfecto; causal, según el cual la causa de la idea de un ser perfecto tiene que estar en un ser perfecto; y, ontológico, que Descartes toma de San Anselmo. En este texto se desarrolla el argumento ontológico. Descartes dice que, cuando pienso en un triángulo, pienso en una figura que tiene tres ángulos, pero en esta figura no está implícita su existencia. En cambio, cuando pienso en Dios pienso en lo más perfecto. Lo perfecto ha de tener todas las cualidades, incluida la existencia. Por tanto, Dios tiene que existir, porque si no cabría pensar en algo igual de perfecto que Dios y que además existiera. Tras demostrar la existencia de Dios, Descartes demostrará la existencia del mundo y dirá que, en rigor, la única sustancia que existe por sí misma es Dios. 2.3.- Justifica el texto desde la posición filosófica del autor. En este texto Descartes expone uno de los argumentos para demostrar la existencia de la sustancia infinita. Pero, ¿cómo ha llegado este autor a esta certeza? Descartes ha llegado a ello a través de la duda. La duda es el punto de partida del método cartesiano, un método que se inspira en el modelo matemático y que solo acepta dos operaciones mentales para llegar a la verdad: la intuición (captación inmediata de una verdad intelectual) y la deducción (cadena de intuiciones perfectamente enlazadas). Este método ha de basarse en cuatro reglas: Evidencia como punto de partida. Análisis de las afirmaciones generales en sus elementos más simples. Síntesis o ascensión desde lo más simple hasta lo más complejo. Enumeración o revisión de los pasos dados anteriormente. Descartes considera que todos los saberes están relacionados y que la raíz de todos ellos es la metafísica. Por eso, cuando llega a tener una madurez suficiente, se dedica a buscar la evidencia que sirva en filosofía como punto de partida y su búsqueda será a través de la duda. La duda cartesiana es universal, metódica y teorética. Es una duda que se plantea por tres motivos: porque no podemos fiarnos de los sentidos, porque no podemos estar seguros de la existencia de los objetos sensibles por la imposibilidad de distinguir la vigilia del sueño, y porque hasta puede que un genio maligno haya puesto su empeño en que me equivoque siempre al razonar, con los cual ni las matemáticas serían ciertas. Pero, a un paso de caer en el escepticismo, Descartes descubrió una verdad libre de toda duda: la existencia del pensamiento, pienso luego existo. A partir de este momento, Descartes estaba en condiciones de construir su metafísica, puesto que había encontrado una primera verdad libre de toda duda. La metafísica es el estudio de la sustancia. Llamamos sustancia a aquello que existe por sí mismo y la metafísica tradicional distingue tres sustancias: el alma (sustancia pensante), Dios (sustancia infinita) y el mundo (sustancia extensa). 4.1.- SUSTANCIA PENSANTE.- Es posible que todo lo que pienso sea falso, pero hay algo evidente: que yo lo estoy pensando. Esta frase “Pienso, luego existo”, también conocida como el cogito cartesiano, le sirve a Descartes como criterio de certeza, y dirá que todo lo que sea conocido con igual claridad y distinción deberá admitirse igualmente como verdadero. Esta verdad ha sido conocida por intuición, pero ahora empieza la fase deductiva de su pensamiento. El problema es que del cogito no parece deducirse nada. Sólo puedo estar seguro de que pienso, pero nunca podré saber si a mi pensamiento le corresponde alguna realidad (solipsismo). Cuando pienso, pienso ideas. Las ideas son, por una parte, un acto mental y, en este sentido, todas tienen la misma realidad; pero, por otra parte, representan objetos y, en este sentido, no todas tienen la misma realidad, porque no todas representan lo mismo. Por ejemplo, no es lo mismo la idea de un árbol que la de una sirena. Pero, desde el punto de vista del cogito, yo sólo puedo estar seguro de las ideas como actos mentales, no de la existencia de los objetos que representan. No obstante, Descartes vence el solipsismo. Para vencerlo, investiga el origen de las ideas y así distingue: a) Adventicias, que son las ideas que proceden de las percepciones; por ejemplo, un árbol. b) Facticias, que son las ideas que la mente construye a partir de otras ideas; por ejemplo, una sirena. c) Innatas, que son las que la mente trae en sí misma. Entre éstas, Descartes cita la idea de infinito. 4.2.- SUSTANCIA INFINITA.- A partir de la idea de infinito Descartes demuestra la existencia de Dios. Y lo hace mediante tres argumentos: • Si me reconozco como un ser imperfecto, es porque tengo la idea de un Ser Perfecto, es decir, de Dios. Argumento gnoseológico. • La causa de la idea de un Ser Perfecto no puede estar en un ser imperfecto, sino que tiene que estar en un Ser Perfecto. Argumento de la causalidad. • Cuando pienso en Dios, pienso en lo más perfecto. La existencia es una perfección. Luego, Dios tiene que existir. Argumento ontológico, que Descartes toma de San Anselmo. A partir de la existencia de Dios, demuestra la existencia de la realidad exterior. 4.3.- SUSTANCIA EXTENSA.- Si Dios es infinitamente bueno y veraz, no puede permitir que nos engañemos cuando pensamos que el mundo existe, luego el mundo tiene que existir. Descartes no había podido demostrar a partir del cogito que a mi pensamiento corresponde una realidad, pero sí lo consigue a partir de Dios. Ahora bien, lo que Dios garantiza del mundo son las cualidades primarias, que son objetivas. Las cualidades primarias son las que se pueden expresar numéricamente; es decir, la extensión. Sin embargo, las cualidades secundarias como el color, el sabor, etc… son subjetivas y por eso las elimina de la física. En el universo cartesiano todo se reduce a materia y movimiento. Concibe el universo como una máquina, en el que todo funciona según leyes. Esto lo aplica a todos los seres del universo, (plantas, animales…). El problema se le vuelve a plantear cuando se refiere al ser humano, porque si el ser humano es una máquina, ¿cómo se explica la libertad? Y si no existe la libertad, ¿qué sentido tiene la moral? Para resolver esta cuestión, Descartes adopta el modelo platónico según el cual el alma es independiente del cuerpo. El alma es pensamiento, mientras que el cuerpo es extensión. Pero ambas se comunican a través de la glándula pineal. 3.- Relaciona la temática del texto con otra posición filosófica y valora razonadamente su actualidad. Considero adecuado comparar los planteamientos filosóficos de Platón y Descartes porque entre ambos existen similitudes y diferencias en tres sentidos: epistemológico, ontológico y antropológico. Desde el punto de vista epistemológico podemos señalar tres similitudes y tres diferencias. Tanto Platón como Descartes son autores idealistas; es decir, creen que las Ideas son la base del conocimiento. Sin embargo, mientras que para Platón las ideas han existido siempre, para Descartes son producto del razonamiento. En segundo lugar, ambos autores defienden la existencia de ideas innatas. Platón justifica esto hablando del conocimiento como reminiscencia. Las ideas existen desde siempre y el alma las conoce, pero al entrar en contacto con el cuerpo olvida este conocimiento que, a través de la educación, recupera. Descartes, en cambio, cree que las ideas innatas son connaturales a la propia razón, forman parte de ella, y por eso no ve necesario justificar su existencia hablando de la reminiscencia. En tercer lugar, ambos autores desconfían de los sentidos y creen que solo el conocimiento racional nos permite alcanzar la ciencia. Sin embargo, Platón es objetivista, porque cree que las ideas tienen una existencia objetiva mientras que Descartes es subjetivista, porque subraya la importancia del sujeto en el conocimiento. Desde el punto de vista ontológico, existe una diferencia entre ambos autores en lo que respecta a la importancia que le dan al mundo exterior. Descartes cree que hay tres sustancias: alma, mundo y Dios. El mundo, la sustancia extensa, tiene una categoría importante y es real, basándonos en la bondad divina. Platón, en cambio, cree que el mundo sensible es solo una copia imperfecta que imita y participa de las Ideas. Desde el punto de vista antropológico, ambos tienen una concepción dualista del ser humano. El ser humano es un compuesto de alma y cuerpo. Según Descartes alma y cuerpo se unen en la glándula pineal. Según Platón, cada parte del alma se localiza en algún lugar del cuerpo y el alma racional, la sustancia pensante de Descartes, tiene una categoría superior al resto. Valoración actual La actualidad del pensamiento cartesiano es evidente en dos aspectos: la importancia que el autor concedió a las matemáticas y la sospecha de que el mundo que creemos como real no sea más que una ilusión de los sentidos. En cuanto a la primera idea cabe decir que a partir de él el conocimiento de las cosas se ha conseguido cuantíficándolas. Lo real se identifica con lo matematizable, hasta el punto de que hoy en día la fe en la ciencia ha sustituido a la fe en Dios. Lo más actual en este sentido es el valor de la informática hoy. El funcionamiento de los ordenadores se toma como modelo del funcionamiento de la mente humana. Hoy hablamos del mundo digital, un mundo en el que todo se rige por la lógica, en el que toda deducción es perfecta. En cuanto a la segunda idea cabe decir que el desarrollo tecnológico y los avances en astronomía nos pueden llevar a pensar si nuestro mundo o nuestra realidad no es más que un submundo ante otra realidad desconocida. Esta idea ha inspirado la literatura y cine actual, en el que podemos destacar títulos como El show de Truman, Matrix o la española Abre los ojos.